la curva se amplía
a medida que la abordo
no llega nunca la recta la curva
me resulta inabarcable
así siento la vida
esto que te dan un día
esto que te dejan en usufructo
y donde no hay más
que una dirección obligada
la curva: o te inclinas
en el sentido que se abre
o te despeñas
y acaso ese es mi destino




le esperan pero no se presenta y tiene que revisar las pruebas decisivas
o lo hace él o nadie daría con la clave y el teléfono de su piso muere
desgarradamente a cada llamada y es extraño pero se ha tirado pronto
de la cama ha tomado el autobús que recorre todo el perímetro de la urbe
y que baja hasta el puerto y que sube hasta el barrio alto y que se cuela
por la historia de la ciudad vieja y allí apoltronado en el último asiento
con la libreta y el lápiz mira a la calle mira al pasillo mira al interior
de sus párpados donde ve lo que nadie más puede ver