despertar de noche y que palabras en multitud te acosen
sentir cómo desbordan los límites y caen sin fraguar en una materia
nueva la luz de la mesilla no se encuentra la lámpara queda velada
aturdido aciertas a tomar unas hojas de papel y las rayas inconexas
bocabajo vas anotando verbos y sustantivos que se paralizan
como ellos crees que debe haber un camino imprevisto
la ausencia de claridad te hace caer rendido no es su hora
sino una galopada de palabras que se desmanda agotadoramente